La nueva presidenta de la multsindical, que será la primera mujer en la historia encabezando el movimiento sindical, plantea el fin del actual Código Laboral y crear una nueva Ley de negociación colectiva. Reajuste del sector público será una de sus primeras pruebas al mando del mundo laboral.
Bárbara Figueroa, la dirigente nacional del Colegio de Profesores e integrante de la Comisión Política del Partido Comunista, tendrá la responsabilidad de conducir la Central Unitaria de Trabajadores (CUT) que, por primera vez en su historia se pondrá bajo la guía de una mano femenina.
DESAFÍOS
La primera prueba de la dirigente serán las negociaciones por el reajuste de salarios para el sector público, que se viene en octubre, pues la Agrupación Nacional de Empleados Fiscales (ANEF) aporta miles de sus asociados a la multisindical.
Además, Figueroa deberá establecer contactos y negociaciones con autoridades del Gobierno y del empresariado en temas como el aumento del salario mínimo, que el próximo año contaría con una nueva institucionalidad, si es que el Congreso aprueba el proyecto de ley enviado por el Gobierno.
Otra prueba de fuego será la flexibilidad laboral que exige el empresariado, al igual que el fin de las indemnización por años de servicios, puntos que son rechazados inmediatamente por la CUT. También propone terminar con el actual Código Laboral y establecer una nueva Ley de negociación colectiva.
MAGISTERIO
Figueroa proviene de las Juventudes Comunistas, desde donde ha realizado un largo trabajo político y social en la comumna de Puente Alto, junto con destacarse en el Colegio de Profesores, donde se encargó de temas como la carrera docente
También participó activamente en las movilizaciones por educación sin lucro el año pasado, tuvo activa presencia en las movilizaciones de la CUT y es reconocida por su capacidad de conducción en el magisterio, por lo que cuenta con el apoyo de los dirigentes estudiantiles y correligionarios Camila Vallejo y Camilo Ballesteros.
Figueroa plantea una renovación en las estructuras internas de la CUT que le permitan aumentar la legitimidad ante otros actores de la sociedad civil, con mayor capacidad de convocatoria. Su idea es que los trabajadores "disputen el poder en la primera línea", especialmente en los espacios legislativos.
La primera prueba de la dirigente serán las negociaciones por el reajuste de salarios para el sector público, que se viene en octubre, pues la Agrupación Nacional de Empleados Fiscales (ANEF) aporta miles de sus asociados a la multisindical.
Además, Figueroa deberá establecer contactos y negociaciones con autoridades del Gobierno y del empresariado en temas como el aumento del salario mínimo, que el próximo año contaría con una nueva institucionalidad, si es que el Congreso aprueba el proyecto de ley enviado por el Gobierno.
Otra prueba de fuego será la flexibilidad laboral que exige el empresariado, al igual que el fin de las indemnización por años de servicios, puntos que son rechazados inmediatamente por la CUT. También propone terminar con el actual Código Laboral y establecer una nueva Ley de negociación colectiva.
Figueroa proviene de las Juventudes Comunistas, desde donde ha realizado un largo trabajo político y social en la comumna de Puente Alto, junto con destacarse en el Colegio de Profesores, donde se encargó de temas como la carrera docente
También participó activamente en las movilizaciones por educación sin lucro el año pasado, tuvo activa presencia en las movilizaciones de la CUT y es reconocida por su capacidad de conducción en el magisterio, por lo que cuenta con el apoyo de los dirigentes estudiantiles y correligionarios Camila Vallejo y Camilo Ballesteros.
Figueroa plantea una renovación en las estructuras internas de la CUT que le permitan aumentar la legitimidad ante otros actores de la sociedad civil, con mayor capacidad de convocatoria. Su idea es que los trabajadores "disputen el poder en la primera línea", especialmente en los espacios legislativos.
