Mediante un comunicado público, la Rectora de la Universidad Arcis, la Psicóloga y Académica Elisa Neumann, informó de la cobarde e incalificable agresión de que fue víctima, de parte de un grupo de unas cincuenta personas, que dicen actuar en nombre de una supuesta "coordinadora triestamental", que no es sino la expresión de un grupo ultraideologizado e irracional, cuyo fin propósito último apunta a destruir el proyecto académico que representa la Universidad Arcis, de suyo complicado por una severa crisis económica. Junto con anunciar una querella por homicidio frustrado contra los que resulten responsables, la Rectora afirmó que no renunciará a la tarea de salvar un proyecto académico que lo merece. Este es su relato de los hechos:
Desde hace ya varios meses la "Coordinadora Triestamental" viene desarrollando una escalada de diversas acciones de naturaleza agresiva y violentista en contra de instalaciones y personas (secretarias de Rectoría y contra mi persona) cuyo objetivo es la Renuncia de la Rectora y del Conjunto de la Corporación.
Estas acciones, absolutamente contradictorias con la voluntad de esta Rectora de desarrollar un proceso de estabilizaciòn y democratizaciòn, colocan en riesgo la estabilidad y gobernanza institucional que como institución debemos preservar. El funcionamiento normal de la actividad académica, cumplir con los compromisos vinculados a los CAE, entregar la integridad de los servicios estudiantiles, normalizar los procesos de pagos, buscar viabilidad financiera y asumir responsablemente una restructuración institucional, es el único camino para asegurar la viabilidad y autonomía de nuestra casa de estudios.
Es de público conocimiento que en estos momentos estamos siendo investigados por el MINEDUC y que su informe se entrega el 28 de octubre. Por diversos medios se nos ha informado que de no lograr un mínimo de estabilidad, cumplir los estatutos, un plan económico y asegurar recursos económicos nos arriesgamos al cierre inminente.
En esta situación,que requiere de la máxima responsabilidad y cordura, que en nada obstaculiza los procesos de discusión académica, ha sido perturbada brutalmente por acciones violentas y sin sentido que no miden las consecuencias de empujar a estudiantes a la comisión de actos que constituyen delitos. ARCIS no esta al margen del respeto a dignidad y la integridad física de las personas.
Los hechos han sido los siguientes:
1. El 29 de septiembre, alrededor de 50 estudiantes en forma violenta y agresiva irrumpieron de modo extremadamente violento en la reunión de la Corporación. Su objetivo era leer una carta, que supuestamente habrían enviado a la Corporación sin obtener respuesta. Esto, que fue desmentido por el Presidente de la corporación se ha presentado como la "razón" para irrumpir, amenazar e instalar una escalada de violencia.
2. Con posterioridad a este hecho y en más de 4 acciones consecutivas, se irrumpió en mi oficina con la clara intención de agredirme, amedrentando a las secretarias de rectoría. En la oportunidad quedo destruida la rectoría,sus muebles y mis efectos personales todo lo cual está a la vista de todos.
3. En ese contexto de total transgresión a las mínimas normas institucionales, es que se solicitó la desvinculación de Leslie Maxwell, Miguel Caro, Carlos Casanova y Andrés Leiva. Todos ello han estado detrás de este tipo acciones, promoviendo acciones violentas, victimizandose ante la medida y colocando irresponsablemente como fuerza de choque a los estudiantes. El objetivo es la renuncia de la Rectora y de la totalidad de la Corporación. Poco les importa la violación de los estatutos y arriesgar la supervivencia de la universidad.
2. Con posterioridad a este hecho y en más de 4 acciones consecutivas, se irrumpió en mi oficina con la clara intención de agredirme, amedrentando a las secretarias de rectoría. En la oportunidad quedo destruida la rectoría,sus muebles y mis efectos personales todo lo cual está a la vista de todos.
3. En ese contexto de total transgresión a las mínimas normas institucionales, es que se solicitó la desvinculación de Leslie Maxwell, Miguel Caro, Carlos Casanova y Andrés Leiva. Todos ello han estado detrás de este tipo acciones, promoviendo acciones violentas, victimizandose ante la medida y colocando irresponsablemente como fuerza de choque a los estudiantes. El objetivo es la renuncia de la Rectora y de la totalidad de la Corporación. Poco les importa la violación de los estatutos y arriesgar la supervivencia de la universidad.
4. Esta realidad y la gravedad de lo echos están a la base de la decisión de desvincular a estas personas. NO SE TRATA DE QUE PIENSEN DISTINTO. ELLOS PROMUEVEN ACCIONES QUE PONEN EN RIESGO LA INTEGRIDAD DE LA UNIVERSIDAD, MI INTEGRIDAD Y LA DE OTROS FUNCIONARIOS QUE TAMBIÉN HAN SIDO AMENAZADOS.
5. El día de hoy fui amenazada y enfrentada por una turba de alrededor de 50 estudiantes, liderados por Leslie Maxwell y Carlos Sánchez. Intenté dialogar con ellos, alguien me dijo que mejor me refugiara ante la inminente agresión y así lo hice. Al ingresar a la Rectoría se me adelantó la Señora Leslie Maxwell que facilitó el ingreso de más estudiantes.
6. Logré refugiarme en la oficina de la entrada de Rectoría cuando se desató una situación inverosímil para una universidad. Golpearon VIOLENTAMENTE las puertas...Me protegí primero con un mueble...rompieron los vidrios, patearon y lograron entreabrir la puerta. Puse como último recurso un escritorio como escudo, el cual rompieron también a punta de puntapiés.
7. Leslie Maxwell y Carlos Sánchez me señalaron a viva voz, que si presentaba mi renuncia ellos se encargarían de protegerme y no temiera por mi integridad física.
8. Me negué a ello, y guardé silencio. He resistido agresiones más violentas, como cuando intentaron secuestrar a mi hijas para hacer callar a Andrés Lagos en sus denuncias en contra de torturadores.
9. El resultado fue que abrieron la puerta a patadas, dieron vuelta el kardex y rompieron a golpes el escritorio con el cual me protegía.
10. Me salvaron de mayores agresiones unos funcionarios y académicos. Mientras salía me tiraron el pelo, recibí puñados de tierra y empujones. Mientras otros me gritaban, "presenta licencia médica", groserías y múltiples ofensas personales. Todas acciones que me parece absolutamente crueles y desmedidas, fuera de toda conducta aceptable en una universidad.
11. A pesar de todo lo anterior, le comunico a la universidad que NO VOY A RENUNCIAR,. Me asiste la convicción de que los violentos y los que creen que el Estado "salvará" a ARCIS ante una crisis financiera o administrativa, representan un grupo minoritario.
La U. ARCIS es un proyecto académico que debe ser protegido y defendido. Y continuaré en esta tarea.
FUENTE : RED DIARIO DIGITAL
